Anoche...en esos momentos de ausencia de sueño, divago conmigo misma y recordé a mi viejo profesor , nadie lo quería por su mal genio, pero yo ahora lo admiro. En una de sus clases de historia y literatura leyendo el libro "El lazarillo de Tormes"...nos explicó una secuencia que se me quedó muy gravada y anoche no sé por qué la asimilé a una secuencia de mi vida...
El pobre lazarillo que pasaba mas hambre que el perro del "afilaó" ( que se comía las chispas por comer algo caliente). Un día al ciego le regalaron un racimo de uvas, y se sentó junto Lázaro y le dijo:
-Lázaro como yo no veo, para que no hagas trampas, cojeremos de una en una, una vez cada uno...
Después de un rato y cuando el racimo se iba agotando, le dice el ciego:
- Lázaro estás cogiendo mas de una y no es eso lo que acordamos.
-Maestro como lo sabes si eres ciego?
-Porque yo estoy cogiendo de dos en dos...y callas...
Hay momentos en la vida...en que la "ceguera" no nos impide ver...
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Manella
Maravilloso!
ResponderEliminarQue buen mensaje, la ceguera no pasa por los ojos, la mente y el alma tamb´´en ven.
Gracias amiga por tus comentaris, por leer, hubiera querido contestarte por mail, pero vale por aquí, hay mas sociedad conyugal, solo estoy en silencio, sabrás qe nos suele pasar que las palabras se van gestando y ven la luz en su momento.
Un fuerte abrazo
Magah
precioso,
ResponderEliminary una verdad como un templo,
ke la ceguera no, nos inpide ver,
somo no sotros ke no keremos ver,
besosss,muy buena entradaa
a esta conclusión final le viene que ni pintao el final de un poema de Alfonsina Storni que se llama El engaño y que dice:
ResponderEliminarPersistes, con aire de actor del papel dueño.
Yo te miro callada con mi dulce sonrisa,
Y cuando te entusiasmas, pienso: no te des prisa,
No eres tú el que me engaña; quien me engaña es mi sueño.
Besos
muy bueno leerte esta mañana
ResponderEliminarfelicidades
Está repleto de ciegos deambulando como zombies por el mundo. Gente que mira sin ver...
ResponderEliminarY ya lo sabés: "Ojos que no ven, corazón que no siente".
Primera vez que paso por acá.
Cariños
R.P.
Bonito post. Un abrazo de los grandes.
ResponderEliminarEl Lazarillo de Tormes... lo leí cuando aún no tenía ojos para la vida...
ResponderEliminarQuizás debiera retomarlo, porque entonces no sabía lo que sé y posiblemente no conseguí entender muchas cosas.
Gracias por recordármelo.
Recuerdo ese trozo. Genial.
ResponderEliminarQue listo el ciego.
Besos.
Muchos, muchos momentos.
ResponderEliminarMe gusta este pasaje del Lazarillo.
Besos
Hay momentos en la vida en que la ceguera nos deja oler
ResponderEliminarbesos
Buenas Noches...me encontre con este blog muy interesante...y con esta entrada, me devolviste a mis epocas de secundaria...quizas deberia leerlo otra vez...
ResponderEliminarSaludos y Exitos!!!
bello espacio!!!
Au Revoir...